La colección Royal Oak presenta una variedad de modelos embellecidos con esferas verdes. Las nuevas propuestas son un Royal Oak «Jumbo» Extraplano de platino 950, un Royal Oak Cronógrafo Automático de oro amarillo de 18 quilates en edición limitada y tres nuevas variantes del Tourbillon Volante Automático en oro rosa o titanio, todas ellas realzadas con vivos matices verdes.

Vista de cerca de un reloj Royal Oak «Jumbo» Extraplano.

El esbelto diseño del «Jumbo» de 39 mm se completa con una caja y una pulsera de platino 950, junto a una esfera verde ahumado con motivo «rayos de sol». Es la primera vez que se usa esta configuración en la colección 15202.

El fondo de cristal de zafiro ofrece una vista privilegiada del calibre de Manufactura 2121 de carga automática, con una masa oscilante de oro de 22 quilates.

Vista de cerca de un reloj Royal Oak Cronógrafo Automático.

El Royal Oak Cronógrafo Automático se ofrece en una nueva gama de vivos colores, con una caja de oro amarillo de 18 quilates y una esfera verde. La esfera luce un motivo «Grande Tapisserie» que se complementa con tres contadores acaracolados.

El modelo está provisto de un fondo macizo que incorpora el grabado «Limited Edition» (125 piezas). Alojada en una caja de 41 mm, esta versión del Royal Oak está impulsada por el calibre de Manufactura 2385 de carga automática.

El Royal Oak Tourbillon Volante Automático exhibe el talento de los artesanos de la Manufactura con tres nuevas variantes y un gran despliegue de acabados a mano. Cada una de ellas se presenta en una caja de 41 mm y está provista de una esfera Tapisserie verde con motivo «rayos de sol» emanando de la jaula del tourbillon volante. A diferencia del tourbillon convencional, el tourbillon volante evita el puente superior, permitiendo vistas del escape, el órgano regulador y la jaula en movimiento.

Vista de cerca de un reloj Royal Oak Cronógrafo Tourbillon Volante Automático.
Vista de cerca de un movimiento automático con tourbillon volante, calibre 2950

El fondo de cristal de zafiro permite contemplar la última generación del movimiento automático con tourbillon volante de Audemars Piguet, el calibre 2950, y su exclusiva masa oscilante a juego con la tonalidad de la caja.

Vista interior de una boutique Audemars Piguet.